Con la evolución de la mentalidad y los nuevos condicionantes, en particular medioambientales, los municipios turísticos se encuentran en plena mutación hacia un modelo de economía circular, ciudad más inteligente, más conectada, más ecológica y segura.

El concepto de “ciudad inteligente” se basa en desarrollar ciudades adaptables y eficientes para mejorar la calidad de vida del creciente número de habitantes. La “ciudad inteligente” está volviendo a poner a las personas en el centro de la ciudad respetando el medio ambiente.

En el contexto del calentamiento global y el aumento de la población urbana, la ciudad se vuelve cada vez más compleja. Es necesaria una planificación urbana destinada a ayudar a los responsables de la toma de decisiones locales a tomar decisiones inteligentes y sostenibles para la ciudad inteligente del mañana, como por ejemplo reducir las emisiones de CO2 mediante la optimización de la eficiencia energética de los municipios y el desarrollo industrial de redes inteligentes para promover las energías renovables locales y optimizar el consumo energético de los edificios y complejos turísticos. En este sentido, el desarrollo de tecnologías solares limpias, baratas e inagotables supone un enorme beneficio a largo plazo. Aplicar nuevas fuentes de energía, supone mejorar la calidad de vida de las comunidades y la mejora de infraestructura en el sector turístico, la reducción de costes y la llegada de la energía a puntos de interés turísticos aislados.

En la situación actual de crisis energética, los municipios turísticos deben promover la generación de energía de forma sostenible mediante el uso de una fuente de energía local autónoma, inagotable e independiente de las importaciones y ajenas a las fluctuaciones del mercado. El uso de sistemas de autoabastecimiento, energía solar, en un local, un edificio de oficinas o un taller, por ejemplo, reduce el gasto eléctrico externo entre el 30% y el 40% de la factura. Contar con este tipo de dispositivos también rebaja las emisiones contaminantes hasta un 45%, un porcentaje que se dispara hasta el 85%, si se integra una batería de almacenamiento.